miércoles, 23 de mayo de 2007

Don Quijote de la Mancha (en la capa de ozono)

Andás exclamando por ahí que el mundo ya no tiene salvación. Que el calentamiento nos va a llevar a todos al demonio, que esto va a ser un infierno.
Y bueno, fuentes no te faltan. Supe de Lovelock y su teoría de Gaia, de que el mundo se va a acabar en 20 años. También conocí de los científicos ingleses y su estudio de que cuando alcancemos las 400 partes por millón de carbono en la atmósfera, el daño climático será irreversible. ¡E imaginate que vamos por 396 ppm, que tirada!
Pero no sé, yo tengo mis dudas. A decir verdad, siempre me he mantenido positivo, esa es mi naturaleza. ¿Qué me queda, echarme a llorar y no hacer nada? ¡Jamás! No me voy a rendir, ni a dejar que el planeta se me vaya entre las manos.
Vos, en cambio, no te sentís motivado. Nos ponemos a filosofar acerca de nuestra existencia, y discutimos si vale la pena luchar por una causa tan quijotesca. "Por supuesto", afirmo yo. "Te pido que te mantengás positivo, mi hermano. Y decite a ti mismo: si algo puedo hacer, lo hago”.
Entonces me preguntás que qué puede hacer tan solo una persona. Que si una persona basta para cambiar a la sociedad, o hasta al mundo entero. Y comprendo que te sentís solo, que tenés miedo. Ojalá supiera la respuesta, ojalá pudiera decirte que todo va a estar bien, pero no puedo. Lo único que se es que un hombre hace lo que puede hasta que se cumple su destino. Y nada es en vano, al menos eso creo.

No hay comentarios.: